Las cosas que nos marcan. Deuteronomio 34:1-12


Introducción 

    ¿Qué se recuerda de uno cuando muere? ¿Qué parte de nuestra vida quisiéramos que dominara en los recuerdos de las personas? Mi abuelito era un hombre que no fue a la escuela, no podía leer ni escribir. Pero era un hombre importante en su cantón: cuando joven era el comandante cantonal. También era un hombre que abría su casita a todo el que pasaba y mucha gente solía pasar a tomarse un descanso en su banco de madera. También era el hombre que iba a recoger a los pastores y misioneros a la estación del tren cuando visitaban su cantón. Pero una de las historias que más me impresionó fue la que cuenta que, en los cultos, cuando alguien recitaba un versículo, pero olvidaba la cita bíblica, solía salir del problema diciendo: “la cita el hermano Benigno la sabe”. Cosas como esa se recuerdan de él. Siempre hay cosas de nuestra vida que nos marcarán porque serán esas las cosas que nos definirán en el recuerdo de las personas. ¿Cómo seremos recordados? Consideremos esa mañana cómo fue recordado Moisés y dejémonos impactar por él.  

 

I. Los errores nos marcan, procuremos que no sean fatales (vrs. 1-4) 

A. Dios le muestra la tierra que prometió (vrs. 1-3) 

B. Dios le recuerda que no podrá pasar a la tierra (vr. 4) 

1. El incidente en Num. 20:7-12:

    a. Hay ira contra el pueblo (vr. 10 a);

    b. Hay incredulidad (vr. 10b y 12;

    c. No trataron dignamente al Señor al no seguir su indicación o no darle el                                                crédito: “¿Acaso tenemos que sacarles agua de esta roca?” (NVI)  (vr. 12b). 

2. Se le recordó su pecado y la disciplina del Señor (32:51-52). 

 

Aplicación: Nuestras fallas para con Dios, nuestros pecados evitan que podamos gozar de las bendiciones que más hemos anhelado en la vida. La disciplina del Señor a veces puede ser muy dura. Moisés no falló en entrar a Canaán porque murió, más bien murió porque falló en entrar a la tierra de Canaán. ¡No cometamos errores que nos marcarán para la posteridad! 

 

II. Nuestro servicio a Dios marca, sirvámosle con entusiasmo (vrs. 5-9) 

  1. A. Dios se hace cargo de su funeral de su siervo (vrs. 5-6) 

  1. “Siervo de Jehová”: ¿habrá mayor honor que este? (39 veces en 17 vrs. De 848 incidencias).  

  1. “lo enterró”: ¡qué honor!: Moisés era tan especial que sus últimos momentos en la tierra los pasó en íntima comunión con Dios, quien no permitió que nadie más participara en su sepultura.  

  1. B. Es recordado por su gran vigor físico (vr. 7): ¡cuando servimos bien al Señor aun el cuerpo lo siente! 

  1. C. Es llorado con especial lamento (vr. 8): el duelo normal por un ser querido fue de 7 días.  

  1. D. Moisés deja preparado al menos a un discípulo (vr. 9). 


Aplicación: hoy día estamos escribiendo la historia de nuestro servicio a Dios. El ánimo y la fidelidad con que lo hacemos será recordado. Será lamentada la partida porque se reconocerá que se está perdiendo a alguien especial, valioso para la obra del Señor. Pero, también puede suceder lo contrario y pasemos esta vida sin ninguna relevancia en lo que a servicio del Señor se refiere: sin pena no gloria. ¡En el peor de los casos la gente hasta puede sentir alivio con nuestra muerte! 

III.  Nuestra intimidad con Dios nos marca, así que busquémosla con desesperación (vrs. 10-12) 

  1. A. Conoció a Dios como nadie: “cara a cara” (vr. 10) (cp. Núm. 12:6-8 y Ex. 33:11) 

  1. 1. Introdujo una nueva era en la historia del pueblo: la de la ley 

  1. 2. Se volvió el modelo de profeta y del profeta final (18:15-18) 

  1. B. Hizo obras poderosas de parte de Dios como nadie (vr. 11-12) 

  1. 1. Impactó el mundo pagano de aquella época (Egipto) 

  1. 2. Impactó al pueblo de Israel, moldeando su fe en el Dios de Israel

  2.  

Aplicación: Nuestra intimidad con Dios será evidente en nuestra vida. De ella dependerá el impacto que tengamos no solo en el mundo incrédulo, sino también en la iglesia.  

 

I/C: Nuestro servicio y amistad con Dios sean nuestra marca de vida, no nuestros errores  

Conclusión 

Hoy día, con la vida que estamos llevando, las decisiones que estamos tomando y la forma en que nos estamos relacionando con Dios estamos escribiendo la historia de nuestras vidas. Quizá no muchos lo noten hoy, quizá pasemos bastante desapercibidos, pero, el día de nuestra partida será claro el asunto: fuimos gente buena, quizá noble, ojalá no gente corrupta… Pero ¿se dirá que fuimos gente de Dios? ¿Te importa el legado que dejarás? 

«Compositor, cantante, productor, bailarín, coreógrafo, humanitario, miembro de los Jackson 5, solista, 13 singles número 1, 13 Grammys, 197 premios y 37 Top 40 Hits. En el Paseo de la Fama del Rock and Roll y legenda de la Motown (Motown se refiere tanto a la compañía discográfica fundada por Berry Gordy Jr. en Detroit en 1959 como al estilo de música soul con influencias pop que popularizó). Se marchó demasiado pronto». Eso dice en el epitafio de... Michael Jackson. 

¿Cómo serás recordado tú? Ese será tu legado.  

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